Conoce la inspiradora historia del fotógrafo Ydwer van der Heide

Cada Wings for Life World Run está repleta de momentos impactantes, y en 2021, un momento que resonó fue cuando el fotógrafo holandés Ydwer van der Heide consiguió recorrer 2 km en su silla de ruedas solo tres meses después de sufrir una lesión medular.

Ydwer es un destacado fotógrafo de deportes de acción, especializado en kiteboarding. Ya había fotografiado la carrera Wings for Life World Run y estaba entusiasmado con la causa benéfica. Pero un jueves normal de febrero de 2021, esa lesión medular con la que estaba tan concienciado se convirtió en su propia realidad.

Ydwer estaba practicando surf cuando fue catapultado sobre su cabeza. No podía moverse y fue trasladado al hospital, donde, tras unas tensas horas iniciales -respirador, cirugía, presión arterial aterradoramente baja-, empezó a mejorar. Pero con una lesión medular incompleta C6, su vida se puso patas arriba.

Ydwer tenía algo de fuerza en el brazo izquierdo, pero el derecho era muy débil y no podía mover las manos ni las piernas. "Después de unas cuatro semanas de rehabilitación, pude mover el pulgar del pie izquierdo, y poco después pude poner algo de tensión en la parte superior de la pierna izquierda, y luego empezó a aumentar muy lentamente", describe. Hoy puede impulsarse hasta ponerse de pie, y dio sus primeros pasos al aire libre con su andador exactamente un año después de su lesión. Pero debe pasar la mayor parte del día en una silla de ruedas, y sus manos "realmente no funcionan".

Además, los retos de la lesión medular van mucho más allá de lo visible. Ydwer lo describe,

"Todo lo que está por debajo de tu punto de lesión no funciona, o no lo hace como de costumbre. Como, por ejemplo, ir al baño, digerir la comida, tu presión sanguínea, tu temperatura... Y, la mayoría de las veces, estos problemas se vuelven mucho más intensos que no poder caminar o usar las manos".

Fue su novia quien le preguntó si quería participar en la Wings for Life World Run, que se celebraba apenas tres meses después de su accidente. "Dije que sí enseguida, porque creo que es un evento muy, muy bonito", dice Ydwer. "Tiene mucha repercusión, todo el mundo puede hacerlo, y se puede hacer en cualquier parte del mundo, lo que me parece muy singular".

Y continúa: "Creo que es muy bueno crear conciencia. Es una locura lo que ocurre, que de repente la vida de la gente sea 180 grados opuesta a lo que está acostumbrada. Si hay alguna posibilidad de encontrar una forma de ser más independiente, hay que intentar conseguirlo".

Ydwer atribuye su propio progreso en parte a mantener una mentalidad positiva. En lugar de fijarse un solo gran objetivo, se fija metas más pequeñas, "intermedias", que sabe que puede cumplir. Ha vuelto a hacer fotos y, aunque no tiene la misma destreza, siente una nueva libertad para experimentar. Incluso ha estado trabajando en un libro con sus mejores fotos de todos los tiempos, que se publicará este verano.

Y está deseando volver a participar en la Wings for Life World Run de nuevo, con el nuevo objetivo de recorrer 100 metros con su andador.

"Mi otro objetivo es motivar a la gente para que participe e intentar conseguir la mayor cantidad de dinero posible para la investigación", dice Ydwer. "Incluso la más mínima diferencia en la mejora puede ser algo enorme para las personas con lesión medular. Así que la investigación no solo consiste en poder volver a caminar, sino en mejorar nuestras vidas un poco más. Cada pequeño detalle supone una gran diferencia".